Ante la pagoda.
En la nave delantera.
Ceremonia dominical.
Solemnidad ritual.
Se conservan aún detalles antiguos decorativos.
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La pagoda Giac Lam, la más antigua de Ciudad Ho Chi Minh construida en 1744, guarda numerosos objetos y datos de gran valor cultural, histórico, escultórico y arquitectónico
Reconocida en 1998 como sitio histórico y cultural nacional, la pagoda Giac Lam está construida con maderas preciosas sobre una elevación que permite extender la vista a un armonioso entorno natural.
La puerta de dos entradas se destaca por su arquitectura religiosa. La nave central expone detalles decorativos originales, con leones de piedra, follaje estilizado y líneas similares a las propias de las culturas de los indios y los khmers. Sin embargo, lo más relevante es un jarrón gigantesco colocado en el lugar más destacado, que simboliza el carácter nacional.
En la nochebuena de cada año, el bonzo que preside la pagoda coloca siempre en la pared del Pilar, símbolo de la nación, sentencias que resaltan los deseos de todos los budistas y del resto de la población: Paz para todo el mundo y dicha para el pueblo.
De las 118 estatuas colocadas en la pagoda Giac Lam, 113 son antiguas, de madera y bronce. La primera colección de los arhat tiene influencias de la escultura china antigua, que se han ido diluyendo a través del tiempo para ceder paso a los acentos nacionales. Las estatuas esculpidas a principios del siglo XIX llevan más caracteres nacionales: rostros más redondos y radiantes de alegría, robustas y vestidas, diferentes a las de la antigua China. Cinco estatuas del buda Zakya Muni y cuatro bodhisativas son creaciones originales de la población sudvietnamita. Hay también nueve dragones volando entre nubes, esculpidos y calados con tanto esmero que acentúan el ambiente sagrado y armonioso del lugar.
Por Van Quy - Fotos: Minh-Quoc
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