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La costumbre de encender inciensos se ha convertido en una característica cultural indispensable en la vida espiritual del pueblo vietnamita. A pesar de que muchas localidades se dedican a hacer varillas de inciensos, la aldea de Doc La, en la provincia de Hung Yen, se considera la cuna de este oficio artesanal.
Con sólo entrar a la aldea, se siente el aroma de los inciensos. Las cestas planas y los tubos llenos de palillos de color rojo parecen flores de múltiples pétalos, y los estantes para secar los inciensos se encuentran en todas partes, en las casas y en los senderos. El color amarillo del incienso en polvo y el color rojo de los palillos se mezclan entre sí, creando una imagen brillante.
La confección de varillas de inciensos no es tan difícil como la agricultura, por lo que todo el pueblo de la aldea de Doc La, desde los ancianos hasta los niños pequeños, conocen bien las fases de producción. La amasadura se realiza por las personas fuertes para hacer la masa flexible. La elaboración y el envasado se llevan a cabo por los ancianos y niños, mientras que el secado necesita las manos hábiles de las mujeres. Después de tomar un sorbo de té, el anciano Nguyen Van Cac comentó: ¨El oficio artesanal en Doc La ha existido durante cientos de años y es transmitido de generación en generación. La introductora de esta artesanía fue una muchacha con el nombre familiar de Nam, nativa de esta aldea. Era hermosa, educada, hábil y trabajadora. Cuando creció, se casó con un hombre de una lejana aldea. Una vez, en una visita a su tierra natal, vio que los aldeanos eran pobres, y para que se ganaran la vida ella les enseñó a hacer inciensos, una artesanía tradicional de la aldea nativa de su marido. Poco a poco, la confección de varillas de inciensos se ha convertido en una labor hereditaria de mi pueblo¨.
Los ingredientes de los inciensos incluyen docenas de materiales de hierbas. Todos son molidos hasta convertirlos en polvo y se mezclan en una proporción específica. Pham Thanh, un aldeano de Doc La, expresó: ¨La proporción es un secreto de familia porque es un factor importante que crea el aroma y la durabilidad de los inciensos. Después de producir una tanda, el artesano encenderá inciensos para comprobar su calidad y ver si se queman por completo y de manera pareja¨. Existen diferentes tipos de inciensos, pero la gente de Doc La produce principalmente inciensos largos y delgados. Cada incienso es de alrededor de 30-40 cm de largo y 2-3 mm de diámetro. Su núcleo está hecho de bambú, que se quema fácilmente. Dos tercios de la vara están cubiertos con polvo de incienso. Los inciensos son de color amarillo o negro, y el tiempo en que arden es de 20-30 minutos. El incienso en espiral tiene ingredientes similares, pero con un pegamento adicional, ya que no tiene el núcleo de bambú. El tiempo en que se quema este tipo de incienso es de 1 ó 2 días.
A diferencia de otros lugares, donde se utilizan secadores, los aldeanos de Doc La todavía mantienen la forma tradicional de secar los palillos esparciéndolos en estantes bajo el sol y la brisa, para que se sequen completamente y retengan el color y el aroma. Conversando con nosotros mientras removía los inciensos en el estante, Ha Thi Hue dijo: ¨El sol ardiente puede secar el incienso en 1-2 días, pero el tiempo se prolonga en los días nublados. Con el fin de evitar un retraso por los días lluviosos, los productores deben seguir las previsiones meteorológicas para decidir el momento de hacer inciensos. En algunos lugares, la gente seca incienso con el calor del fuego para ahorrar tiempo, pero esa manera afecta su olor, así como su color y calidad¨.
La confección de inciensos es un trabajo minucioso que requiere diligencia en todas las fases del proceso. Esta artesanía también está relacionada con la vida espiritual y la práctica de rendir culto, por lo que los productores deben ser honestos y no contaminar su manufactura. El incienso en polvo debe tener buena calidad y la cantidad exacta de inciensos en un paquete debe estar garantizada. Puede ser esta la razón por la cual, durante cientos de años, los aldeanos de Doc La se han hecho ricos gracias a esta actividad artesanal y sus productos han forjado un nicho en el mercado.
En la actualidad, los aldeanos de Doc La siguen el modo de producción concentrada en cada casa, a diferencia del modo individual de antes. Muchas familias han invertido en equipamiento para una línea de producción cerrada, desde el proceso preliminar hasta los envases y la impresión del nombre para proteger su marca comercial. Algunas familias de la aldea, que prosperaron a través de esta artesanía, se trasladaron a las ciudades para abrir tiendas de venta de varillas de inciensos, como Quang Thai, Van Hoa y Hoang Phat en Hanoi, Dong Phat en Ha Dong, Hong Phuc en Hue, Dong An Xuong en Saigón y Dong An My en Hai Duong.
Hoang Van Phi dijo alegremente: ¨La principal temporada comercial en todo el pueblo es desde finales del año hasta enero, pero los aldeanos están ocupados durante todo el año¨. Como un hábito, Phi encendió un incienso en espiral para comprobar su calidad antes de vender los productos. El olor aromático del incienso se esparció, animando a la gente a luchar por una mejor vida.
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