Tras ascender 139 escalones de piedra, se encuentra una pagoda pequeña pero muy especial en medio de la ladera de la montaña de Gieng Tien, volcán durmiente durante miles de años en la isla de Ly Son. Según registros históricos, el lugar solía ser hábitat de tigres, hasta que fue elegido por el monje Giac Tuan como sitio sagrado para practicar el budismo. Sin embargo, la construcción y decoración del templo no se concluyó completamente hasta principios de la década de 2000.
Justo en la entrada se sitúa una estatua de la Diosa de la Misericordia de 27 metros de altura, y en las profundidades de la montaña se hallan santuarios antiguos cubiertos de musgo.
La estatua de 27 m de altura de Quan The Am, la Avalokiteśvara, ubicada sobre un loto pintado de blanco, se encuentra al pie de la montaña Gieng Tien, que es el camino principal hacia la pagoda. Foto: Cong Dat / VNP
Alrededor de Quan The Am, tiene las rocas de formas únicas. Foto: Cong Dat/ VNP
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De acuerdo con leyendas de los budistas, la Diosa de la Misericordia eligió quedarse allí para mantener la paz y proteger a los isleños de los desastres naturales. Una imagen de Buda y el sendero a la pagoda fueron construidos en 2010 e inaugurados en 2012 gracias a la contribución de muchos monjes, seguidores budistas y lugareños.
Desde la pagoda se aprecian pintorescas vistas del mar. Resulta impresionante subir a lo más alto de Liem Tu para observar el cráter, que actualmente semeja un paisaje de pastizales verdes en forma de cuenca. La cima de la montaña es un mirador ideal para disfrutar de una vista panorámica de la isla… por lo cual este lugar se compara a un fantástico mundo de hadas.
La pagoda cuenta con tres cuevas rocosas de diferentes tamaños. La mayor y más elevada, situada en el centro, sirve de vestíbulo principal para adorar a los Budas Tathagata y Ksitigarbha, y al fundador de la isla; otra honra a los Budas del pasado, el presente y el futuro, mientras que la más pequeña, Vien Giac, rezan y meditan los monjes. En la vecindad del templo hay un patio de unos 20 metros cuadrados.
Alejada de las zonas residenciales, la pagoda Duc goza de total tranquilidad y propicia la oración y la meditación. La estatua de la Diosa de la Misericordia frente al mar brinda a los pescadores mucha suerte y protección divina para que puedan superar todas las dificultades y desafíos./.
Por Cong Dat