En sus misivas, los dirigentes manifestaron la solidaridad al pueblo filipino y su convicción de que el país insular superará las consecuencias de la catástrofe y estabilizará la vida de los afectados.
El mismo día, el vicepremier y canciller vietnamita, Pham Binh Minh, también transmitió simpatía al ministro de Relaciones Exteriores de Filipinas, Teodoro López Locsin.
Según el Consejo Nacional de Gestión y Mitigación de Riesgos de Desastres Naturales de Filipinas (NDRRMC, por sus siglas en inglés), el número de muertos por deslizamientos e inundaciones repentinas provocadas por la tormenta Usman ascendió a 85 personas, mientras 20 permanecen desaparecidas.
La causa principal de las muertes fue derrumbe de casas tras varios días de lluvias intensas en algunas provincias en la región central del país, indicó Ricardo Jalad, director del NDRRMC.
El número de los fallecidos por los desastres naturales podría ascender a 105 si los rescatistas no pueden buscar a los desaparecidos, adelantó y agregó que se han acelerado las labores de rescate.
El tifón Usman azotó a Filipinas el 29 de diciembre pasado, causando inundaciones y deslizamientos de tierra en las regiones de Bicol y Bisayas Orientales. El estado de desastre se anunció en las provincias más afectadas como Albay, Camarines Sur, Camarines Norte y Sorsogon.
VNA/VNP