Encuentro con el piloto norteamericano del avión
derribado por Pham Tuan
(de pie), Hanoi, 1973.
Intercambiando experiencias con
pilotos jóvenes.
Cuando recibió la Orden Ho Chi Minh y otros
títulos vietnamitas en 1980.
El primer cosmonauta vietnamita
(izquierda).
Practicando el aterrizaje.
Entrenamiento en la Ciudad de las
Estrellas, antigua Unión Soviética.
Teniente general Pham
Tuan.
Momento con sus seres
queridos.
Pham Tuan Nació el 14 de febrero de 1947. Ingresó
en el Ejército en septiembre de 1965. Es actualmente
Teniente general, Jefe del Departamento General de
Industria Militar. Títulos honoríficos recibidos: Héroe de
las Fuerzas Armadas de Vietnam, Héroe del Trabajo de Vietnam,
Héroe de la Unión Soviética, Orden Ho Chi Minh, Orden
Lenin, Orden de Hazañas Militares de tercera clase y
otros.
| | Confesiones
desconocidas hasta ahora revela Pham Tuan, el primer piloto vietnamita que
derribó un superbombardero B 52 de la aviación norteamericana y el primer
cosmonauta de la nación
Nacido en
una familia campesina en la ribera del río Tra Ly, provincia de Thai Binh,
en el delta del río Rojo, Pham Tuan cuidaba búfalos, ayudaba a sus padres
en la labranza y hacía travesuras, al igual que sus amiguitos de su misma
edad. Sin embargo, gozaba de condiciones favorables para sus estudios
preuniversitarios.
En 1965,
cuando entró en la fase más dura la lucha antiyanqui por la salvación
nacional, ingresó al Ejército junto a tantos otros jóvenes aldeanos. Pham
Tuan recuerda aún:"Entonces, soñaba con ser marinero de guerra. Pero,
después de los exámenes de salud, me mandaron a la clasificación de
pilotos. No logré pasar las pruebas por 'problemitas' en los ojos. Me
mandaron a estudiar ingeniería aeronáutica en la antigua Unión
Soviética."
Por
necesidades de la lucha patriótica, Vietnam pidió a la escuela soviética
que eligiera entre sus estudiantes vietnamitas los mejores para su
formación como pilotos. Esta vez, sí fue seleccionado.
En 1968 se
graduó de la Escuela de la Fuerza Aérea de la antigua Unión Soviética, con
calificación de excelente. Regresó al país con el rango de subteniente y
fue enviado al Regimiento "Estrella Roja", para manejar cazas de
combate.
Recuerdos
inolvidables En la guerra, cada combate deja recuerdos muy profundos.
Pham Tuan rememora todavía su primera batalla en el cielo de Vinh,
cabecera de la provincia centrovietnamita de Nghe An: "Los aviones
enemigos volaban muy bajo y nuestros radares no lograban detectarlos.
Cuando comenzaron el ataque, recibimos la orden de despegar. Perseguimos a
los aviones enemigos durante un largo rato. Fue la primera vez que topé
con los aviones enemigos. Entonces sentía una sensación palpitante y
también de preocupación, pero era impresionante."
Jamás
olvidará la noche del 27 de diciembre de 1972. La oscuridad de la noche se
rompía de vez en cuando por los fogonazos que producían las estridentes
explosiones de las bombas arrojadas en tapiz por los superbombarderos B 52
de la Fuerza Aérea norteamericana en su intento de llevar a Hanoi a la
Edad de Piedra. ¡A castigarlos, en defensa del corazón del país! Y lo que
debía suceder, sucedió:
"Después de
cargar sobre un B 52, pensé enseguida en cómo escaparme del enjambre de
cazas que acompañaban a las 'superfortalezas volantes', y también evitar
que me pegara nuestro propio fuego antiaéreo, que venía desde abajo.
Aterricé con seguridad, sin perder mis preocupaciones. Al despuntar el día
siguiente, al recibir el mensaje de felicitación del general Vo Nguyen
Giap me convencí del derribamiento de ese B 52."
A comienzos
de 1973, tuvo lugar en la cárcel Hoa Lo, bien conocida en el mundo con el
famoso nombre de Hilton-Hanoi, un encuentro de Pham Tuan con el piloto
norteamericano que manejaba el B 52 derribado. La charla se hizo más
interesante cuando el aviador estadounidense expresó que no lograba
comprender qué había ayudado al héroe de la Fuerza Aérea vietnamita a
abatir su superbombardero.
En 1979, le
correspondió un nuevo honor a Pham Tuan: Fue seleccionado para el vuelo
mixto soviético-vietnamita al cosmos, para investigaciones científicas en
aras de la paz. Recordó los entrenamientos físicos para mejorar su
resistencia: "Soy fuerte, pero también me cansó. Me parecieron
insoportables los mareos causados por los ejercicios continuos y rápidos,
con la cabeza abajo y arriba cada tres segundos y durante 10
minutos."
El 23 de
julio de 1980, desde Baikonur, la nave espacial Soyuz 37 llevó a Pham Tuan
y al cosmonauta soviético Victor Vaciliev Grobatko al cosmos para cumplir
las misiones planificadas.
En su vida
cotidiana El héroe Pham Tuan tiene una vida tan sencilla, como la de
tantos otros combatientes de las Fuerzas Armadas de Vietnam. Su esposa es
médica militar y también pasó un tiempo en el campo de batalla. Su hija
mayor es graduada de maestría de auditoría, y su hijo está en un curso de
postgrado. El trabajo diario de jefe del Departamento General de Industria
Militar parece no darle ni un minuto de descanso. Sin embargo, se siente
muy contento, pues tiene una gran confianza en la generación joven, muy
inteligente y dinámica, que sabe acumular conocimientos nuevos y
experiencias de sus mayores en aras del desarrollo del país.
Texto y fotos: Tien
Dung-Tuan
Long-Thanh Dat
|