La bahía de Ha Long se encuentra en la provincia de Quang Ninh, en el noreste de Vietnam. Cubre aproximadamente 1 500 km2, alberga unas mil islas pequeñas y grandes, sin contar las aún desconocidas, y presenta un paisaje marino espectacular. Las islas, de piedra caliza, tienen varios tamaños y formas. En algunos lugares, si se miran desde lejos, las islas parecen estar unas sobre otras. En otros sitios, algunas islas se dividen en dos acantilados, uno frente al otro, con un pequeño riachuelo entre ellos. Otras están dispuestas horizontal y verticalmente durante decenas de kilómetros para crear muchas capas, como un muro firme.
Los miles de islotes de piedra caliza, cada uno con singulares figuras y formas, tienen nombres como Con Cho (perro), Con Con (sapo), Ga Choi (gallo de pelea), Yen Ngua (silla) y Thien Nga (cisne). Estos hacen pensar a los turistas en un mundo de animales gigantes que se han fosilizado durante millones de años.
La bahía de Ha Long no solo muestra estas “esculturas”, sino también grandiosas obras arquitectónicas naturales, con formas de pirámides y conos, como los islotes Dinh Huong (quemador de incienso) y Qua Dao (melocotón). Hay ínsulas solo con arroyos, como las de Dua y Ga Choi, o islotes acostados al lado de una hilera de islas, como los de Yen Ngua y Buom (mariposa). Algunos islotes, como Am y Dinh Huong, tienen cuatro caras planas, mientras que otros son de puntiagudos picos. Los islotes se ven verdes todo el año, con enredaderas, árboles silvestres y plantas preciosas, como Choi, Sam, pino piñonero y orquídeas.
 

En los islotes, hay varias cuevas misteriosas, Dau Go (gruta de madera flotante), Trinh Nu (cueva Virgen), Sung Sot (cueva sorpresa), Thien Cung (gruta de vida paradisíaca) y Hoa Cuong, que fascinan a los visitantes. Con una iluminación opaca, las cuevas tienen bellas estalactitas y estalagmitas que parecen seres humanos, animales y otras formas que hacen sentir al turista perdido en un mundo legendario.
En verano, Ha Long tiene una belleza espectacular, gracias a las enredaderas, plantas silvestres y orquídeas en flor. Los vientos del océano traen el aire frío continental. Muy temprano, cuando el lucero de la mañana todavía brilla sobre el pico de la montaña Bai Tho (poema), muchos turistas están ya en la playa de Bai Chay para disfrutar del aire fresco y contemplar el paisaje al amanecer. Cuando la luz del sol se extiende sobre la bahía con tiras de colores, se aprecia el sombreado de las islas de diferentes formas y el reflejo en el agua. En ese tiempo, los barcos de velas blancas y marrones como las mariposas pasan a través del bosque de islas de piedra caliza hacia el bullicioso puerto.
El otoño trae a Ha Long noches de luna maravillosa. La luz de la luna brilla en la bahía y los destellos en el agua la hacen parecer laminada con una capa de mercurio. Bajo la luz de la luna, las islas son extrañas y misteriosas.
Cuando llega la primavera, los bosques de palmeras datileras y albaricoqueros que rodean la bahía muestran sus flores, creando un paisaje romántico en Ha Long. En ese momento, Ha Long existe en un tenue velo de niebla. Remar en un bote en la niebla hace que los turistas se sientan flotando entre nubes.
Ha Long tiene un sistema de islotes de casi 50 kilómetros de largo con numerosas montañas de 150-200 y hasta 300-400 metros de altura. Las cordilleras de piedra caliza dividen a Ha Long en numerosas áreas hundidas secretas y el fondo de la bahía es bastante profundo, creando un puerto natural que ayuda a los buques y barcos a evitar las tormentas.
Ha Long es una zona con una historia antigua. Desde hace decenas de miles de años, los seres humanos vivían allí. Los arqueólogos han encontrado vestigios dejados por humanos de la Edad de Piedra, como herramientas agrícolas, hachas de piedra y anzuelos.
Ha Long tiene muchas áreas hundidas, grandes y pequeños riachuelos con cursos tortuosos, de modo que recorren la bahía, los turistas van de sorpresa en sorpresa. El paisaje cambia repentinamente. Desde la distancia, parece que las embarcaciones quedarán bloqueadas por un muro de montañas, pero al acercarse se observa un pequeño espacio para pasar. Cualquiera que visite la bahía de Ha Long se sentirá impresionado por su maravilloso paisaje y las cuevas inusuales formadas a lo largo de un proceso complicado de la tectónica geológica miles de años atrás.
.