El pastel de jengibre es una de las ofrendas indispensables para ofrecer a los antepasados del pueblo étnico Cham en Ninh Thuan, con el deseo de una vida más próspera y feliz.
El pastel de jengibre se prepara con harina de arroz glutinoso, azúcar, huevos y levadura de vino. La harina se mezcla con los huevos y la levadura, y se machaca bien hasta formar una masa. Con las hábiles manos de la mujer Cham, las tortas se hacen cuidadosamente en forma similar al jengibre. Después de ser moldeados, los pasteles se ponen a freír en aceite durante unos cinco minutos, hasta que adquieran un color amarillo y estén fragantes.
 Harina de arroz glutinoso preparada para hacer el pastel de jengibre.  Para que el pastel de jengibre tenga sabor delicioso, hay que mezclar la harina de arroz glutinoso con huevos y un poco de vino, y machacar bien la mezcla.  Mujer Cham moldeando los pasteles de jengibre.  Pastel de jengibre listo después de ser moldeado.  Los pasteles de jengibre siempre están presentes en las ofrendas religiosas de los Cham, lo cual representa una característica única en su cultura culinaria. |
Luego, se mojan en una disolución de azúcar y agua para que se abrillanten y no se doblen. Y la última etapa de preparación es sacar cada unidad y ponerlas a secar en una bandeja de 10 a 15 minutos para que queden más crujientes.
Según la tradición de los Cham, los pasteles de jengibre están presentes en todas las grandes e importantes festividades de la comunidad, tales como bodas y nuevo año Kate. Estos pasteles tienen el sabor delicioso del arroz glutinoso y el gustillo encantador de los huevos mezclados con levadura de vino, lo cual hace que el consumidor disfrute de su dulzura y carnosidad.
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Lam Tan Binh, director del Centro Cultural de la provincia de Ninh Thuan, dijo que además de pastel de jengibre, los Cham también llaman a estas tortas banh gian hon (pastel de enojo), porque están relacionadas con la leyenda "Da hon vong phu" en Ninh Thuan, la cual cuenta la conmovedora historia de una esposa llamada Nai Chrao Cho Pho, quien trajo pasteles de gengibre para comer, sentándose sobre una roca, y esperar a su marido hasta que se petrificó.
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Por Quynh Anh
