Según el portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, el presidente estadounidense Barack Obama juzgó la situación en el mar del Este de importancia primordial para la seguridad nacional y la economía global.
Patentizó la disposición de Washington a cooperar con los países en la región en las tareas de salvaguardar y mantener la libertad de navegación en esas aguas.
Por su parte, el vocero del Departamento de Estado de Estados Unidos, Jeff Rathke, reiteró que las acciones de remodelación de Beijing en el Mar Oriental aumentan las tensiones en la zona.
De acuerdo con fuentes oficiales, el Gobierno de Washington anunció al respecto luego del emprendimiento de las edificaciones de las atalayas en el mar de Este.
VNA/VNP
