Cuenta la leyenda que el fundador de la aldea artesanal fue el príncipe Nhan Hue Tran Khanh Du, un talentoso general de la dinastía Tran. Durante un viaje por el río Rojo, enseñó a los aldeanos a cultivar morera, criar gusanos de seda y tejer seda. Desde entonces, el oficio artesanal se ha transmitido de generación en generación.

Casi todos los hogares de Nha Xa tienen una línea de producción independiente.  Sistema de devanado de la seda en una familia de la aldea de Nha Xa.  Teñido por métodos tradicionales, una de las fases importantes en el proceso de producción de seda en la aldea de Nha Xa.  La actividad ofrece puestos de trabajo a la población local y de áreas vecinas..  Secado de la seda.

En el siglo XX, los productos de seda de Nha Xa ya se encontraban en muchas provincias y ciudades del país. Frente a las enormes dificultades en la producción y la búsqueda de mercados, los aldeanos han hecho grandes esfuerzos para preservar sus artesanías tradicionales.

Según Nguyen Hong Tien, presidente de la Asociación de Seda Tradicional de Nha Xa, el 90 % de las familias —800 personas— viven de este comercio. La aldea tiene unos 200 telares. Algunos hogares tienen una línea de producción con cuatro o cinco que operan a plena capacidad. Muchos talleres grandes tienen decenas de telares, incluyendo uno especializado en la elaboración de productos de alta calidad para proporcionar a las tiendas de Hanoi, Hue, Da Nang y Ciudad Ho Chi Minh, e incluso exportar a Laos y Tailandia.

Pham Thi Ha, dueña del taller Hoat Ha, dijo que debido a la volatilidad del mercado en los últimos años los aldeanos han experimentado grandes dificultades para colocar sus productos. Para satisfacer la demanda del cliente, elaboran diferentes productos de alta calidad, como seda cruda, satén y lino, que son muy demandados.

Los aldeanos de Nha Xa crean numerosos productos nuevos. Bufandas de seda, uno de los productos famosos de Nha Xa.  Además de los productos tradicionales, los aldeanos de Nha Xa también confeccionan muchos otros  para satisfacer el gusto de los clientes.

Este oficio no solo crece en el pueblo, sino también en otras regiones vecinas como Lanh Tri, Chuyên Ngoai, Hoa Mac y Dong Van, creando puestos de trabajo para cientos de familias. A pesar de los altibajos, este oficio artesanal ha sido perpetuado por los habitantes de la aldea quienes siempre desean mostrar sus productos, no solo en el país, sino también en el extranjero.